Jordania es un país de Asia ubicado en la zona de Oriente Próximo. Limita con Israel, Siria, Irak y Arabia Saudí.

Os propongo un precioso recorrido visitando Petra, el desierto del Wadi Rum, el Mar Muerto, el Monte Nebo, los Castillos del desierto, Amman y Jerash. Mi intención es que os hagáis una idea de los días que se necesitan y lo que da tiempo de ver cada día para así ayudaros a hacer vuestro propio itinerario.

Mejor época para viajar a Jordania

El viaje lo hicimos en octubre y nos hizo muy buen tiempo, calor, pero tampoco excesivo. Nos comentaron que a partir de noviembre bajan muchísimo las temperaturas y puede hasta nevar. La mejor época para ir el la primavera y el otoño hasta octubre para evitar el calor extremo y el frío. Si viajas de mayo a septiembre, encontrarás mucho calor, pero eso sí, es la temporada más barata.

¿Cómo organizar el viaje?

Los vuelos los compramos por nuestra cuenta, no nos gusta ir con todo organizado en un paquete, ni tampoco ir en grupo. Jordania es un país en el que no hay problema para viajar por tu cuenta, pero eso sí, para mayor comodidad y no perder tiempo, lo aconsejable es contratar un coche con conductor. Nosotros contactamos desde España con Mohamed, un taxista que conocía por referencia de unos amigos que habían estado y contratamos con él todo el tour por el país. Nos estaba esperando puntual en el aeropuerto. Es majo y conseguimos entendernos perfectamente con él.

¿Cuántos días?

Lo ideal son 8 días, ahora te cuento cómo los distribuimos:

  • Petra: 2 noches
  • Wadi Rum: 1 noche
  • Mar Muerto: 2 noches
  • Amán: 2 noches

¿Qué ver?

Jordan Pass

Es recomendable comprar el Jordan Pass que por 70JD, unos 95€ incluye la entrada para 1 día y el visado de entrada al país (si lo compras por separado sale más caro), además incluye también la entrada a más de 40 lugares como Wadi Rum, Ciudadela de Amán, Museo Arqueológico de Jordania, Teatro Romano de Ammán, Jerash, Castillo de Ajlun, Umm Qays, Qasr Al-Azraq, Quseir Amra, Castillo de Karak, Pela, Al-Hallabat, Umm Ar Rasas, Museo Umm Qays, Umm Al Jimmal, Castillo de Shobak, Al-Humaimah, Museo Tradiciones Populares de Ammán, Museo de Áqaba, Museo Arqueológico de Mádaba, Museo de la Sal, Cerro de San Elías, Museo Dar Al-Saraya-Irbid, Museo Karak, Irak Al-Amir, Qasr Al-Kharranah, Qasr Al-Musshatta, Qasr Hamman Al-Sarh, Museo Histórico As-Sal, Parque Arqueológico de Mádaba, Iglesia de los Apóstoles, Palacio Quemando Madaba, Museo del Lugar Más Bajo de la Tierra, Castillo de Áqaba, Rehabilitación Al-Mafraq.

Si quieres el pase con entrada a Petra para 2 o 3 días, el precio sube 5JD (7€) por día.

La tarjeta Jordan Pass hay que comprarla online antes de llegar y exige una estancia mínima de 4 días (3 noches). El Jordan Pass es válido para su uso dentro de los 12 meses posteriores a la fecha de compra, pero tiene validez de dos semanas desde que se utiliza por primera vez en alguna de las atracciones turísticas.

Recorrido

Mapa del recorrido

Día 1 –  Llegada al aeropuerto de Amán y traslado a Petra

Llegada a Amán y traslado a Wadi Musa (Petra), la visita a Amán la dejamos para el final. Para no perder tiempo, habíamos pensado ir directamente a dormir a Wadi Musa, la localidad más cercana a Petra y donde están la mayoría de los hoteles, y así lo hicimos. Son 200kms y unas 2h 40 de viaje, merece la pena hacerlo así para ganar tiempo y al día siguiente empezar, ya descansados, el tour por Petra que es agotador. Al llegar a Wadi Musa nos hospedamos en el Oscar Hotel, es normalito, pero no está mal. Desde la terraza del bar del hotel vimos una preciosa puesta de sol con Petra al fondo. Cenamos en el hotel y nos fuimos a dormir pronto para estar fresquitos por la mañana porque sabíamos que el día iba a ser cansado.

Día 2 – Petra, la joya de Jordania y del mundo

Nos levantamos muy temprano, desayunamos en el hotel y Mohamed nos llevó hasta la entrada de Petra que está a 1km aproximadamente de Wadi Musa.

Estábamos muy emocionados de ir a visitar por fin esta maravillosa ciudad nabatea, Patrimonio de la Humanidad por la Unesco y una de las Siete Maravillas del Mundo Moderno. El nombre de Petra viene del griego y significa piedra, y no es porque esta ciudad esté construida con piedra, sino porque está literalmente excavada y esculpida en piedra rosada, por eso también se la conoce como «la ciudad rosa».

Principales puntos que ver en Petra en 1 día:

Desde la entrada hasta donde empieza la ciudad propiamente dicha hay 1,5 kms, si no lo quieres hacer caminando puedes alquilar un coche eléctrico por 15 JD ida o 25 JD i/v.

Antes de llegar al Siq fuimos viendo algunos vestigios de la civilización nabatea como la Tumba de los Obeliscos. Tras recorrer esa distancia llegamos al Siq.

♦ Siq

El Siq o cañón es la entrada principal a la ciudad de Petra en forma de estrecho desfiladero que en determinados puntos apenas alcanza los 3 metros de ancho. Fíjate en los canalones de piedra situados a un metro de altura que hay a lo largo del Siq. Estos servían para transportar el agua desde los acuíferos exteriores de Petra hasta la ciudad. El canalón que había en la pared de la derecha era el que transportaba el agua a las clases populares y el que mejor conservado está.

EL SIQ

El Siq tiene unos 1,2 kms de largo y está formado por rocas que cada vez se hacen más altas y se estrechan más hasta llegar al punto mágico desde el que por una estrecha rendija formada por las onduladas paredes, se ve el Tesoro de Petra.

Esta vista te deja sin palabras, es sencillamente impresionante.

Steven Spielberg rodó aquí una de las escenas más famosas del cine en la película “Indiana Jones y la última cruzada”. En ella Harrison Ford entra a caballo por el Siq hasta El Tesoro.

El Tesoro

Es el edificio más importante de la ciudad y el símbolo de Jordania y con razón, porque es espectacular. Tiene 40 metros de altura y se cree que data del s I a. C. Se trata de una tumba nabatea tallada en la roca y gracias a su ubicación, protegida por las rocas de alrededor, se ha conservado mucho mejor que otras tumbas de Petra. Su verdadero nombre es Al-Jhazne, pero se la empezó a llamar popularmente el Tesoro porque debido a la magnificencia del lugar, se pensaba que debía albergar todo tipo de joyas. Por eso la urna que corona la fachada está acribillada a tiros, por el ansia de descubrir las supuestas riquezas que contenía.

TESORO DE PETRA

Si tienes tiempo, te recomiendo subir al Mirador del Tesoro. A mano derecha del monumento, mirándolo de frente, hay un caminito que sube hasta él. Se tardan 5 minutos y es fácil subir.

Calle de las Fachadas o Facades Street

Tras estar un buen rato contemplándolo e intentar sin mucho éxito conseguir foto sin gente alrededor, continuamos nuestro recorrido por la ciudad y llegamos a una amplia explanada o calle ancha a la que llaman la calle de las fachadas porque desde ahí se divisan más de cuarenta tumbas. La calle está llena de puestos en los que te venden souvenirs y artesanías y como no, te ofrecen paseos en camello.

CALLE DE LAS FACHADAS
El Teatro romano

Siguiendo por la calle de las Fachadas se llega al Teatro, que originalmente fue tallado en la piedra por los nabateos hace más de 2000 años, en el siglo I, con capacidad para 3000 espectadores y posteriormente fue ampliado por los romanos en el año 106 d.C hasta llegar a acomodar a unos 8500 espectadores en sus 45 hileras de asientos. El teatro fue descubierto en 1961.

TEATRO
Tumbas Reales

Continuamos y a mano derecha encontramos 3 tumbas espectaculares aunque no tan bien conservadas como el Tesoro, se trata de la Urn Tomb, Silk Tomb y Corinthian Tomb. Subimos o trepamos a ellas para llegar al mirador y poder tener unas vistas de todo el valle.

Después de bajar seguimos el camino y dimos con el Gran Templo

Gran Templo

Es uno de los principales templos de la ciudad y el principal de la época romana. Está en la conocida como Avenida de las Columnas, por el gran número de ellas que conserva.

GRAN TEMPLO

Comimos algo en el restaurante del complejo, antes de empezar la tremenda subida al Monasterio, la otra maravilla de Petra.

La subida es muy dura, te ofrecen incluso hacerla en burro, pero la verdad, viendo cómo los tratan y los desfiladeros que hay, preferimos hacerla a pie.  Son unos 800 peldaños, en algunos puntos prácticamente borrados por la erosión y se tarda unos 40 minutos.

Por el camino paramos para descansar un poco y tomarnos un té en un puesto que había con mesas y sillas, que falta nos hacía.

Cuando por fin alcanzamos la cima y contemplamos el Monasterio, supimos que el esfuerzo había merecido la pena. Es espectacular.

El Monasterio – Ad-Deir

Es uno de los mayores edificios del yacimiento, mide 47 metros de ancho y 48 de alto. Fue construido a finales del siglo I o comienzos del siglo II, no está muy claro, inspirándose en la fachada de El Tesoro de Petra. El interior tiene dos bancos laterales, un nicho, un altar y nichos para albergar estatuas. El nombre de monasterio, se lo pusieron los beduinos por las cruces inscritas en la pared que se encontraron en su interior, que se cree que eran de la época bizantina.

Es mejor subir por la tarde porque es cuando la luz del sol le da de pleno. Después de contemplar el paisaje desde el mirador, iniciamos el descenso.

Os comento que hay otro camino para subir que es más fácil. Hay una minivan gratuita que sale del Centro de Visitantes y te deja en la entrada trasera de Petra. Desde allí hay que tomar un jeep que cuesta 5 JD por persona y te deja en el inicio de la subida trasera al Monasterio. Se tarda unos 25 minutos en subir.

Petra by night

Los lunes, miércoles y jueves de 20,30 a 22,30 h. tiene lugar en Petra un espectáculo de luces y sonido llamado Petra by night.

Todo el Siq está adornado con cientos de velas que conducen hasta El Tesoro. El espectáculo consiste en concierto de flauta mientras unos focos proyectan luces que van cambiando de color sobre El Tesoro de Petra. Nosotros no lo hicimos porque estábamos tan cansados que no podíamos pensar en volver a recorrer el kilómetro y medio hasta el Tesoro, pero si hubiésemos tenido 2 días para ver Petra, seguro que lo hubiésemos hecho.

Cuando salimos de Petra íbamos totalmente extenuados. Al llegar al hotel nos sentamos en la terraza para tomar algo y ver el atardecer. Después cenamos y nos fuimos pronto a dormir para recuperar fuerzas, mañana nos espera la Pequeña Petra y el desierto del Wadi Rum.

La visita a Petra fue espectacular, también agotadora, pero estuvo genial, es una verdadera maravilla y merece mucho la pena.

HORARIOPRECIO
6 a 18 h de abril a octubre
6 a 16 h de noviembre a marzo.

Petra by night solo se realiza lunes, miércoles y jueves de 20,30 a 22,30 h.
Si tienes la Jordan Pass no pagas nada, si no:
– 50 JD para un día
– 55 JD para dos días
– 60 JD para tres días
Petra by night no está incluido en la Jordan Pass, cuesta 17 JD

Día 3 – La Pequeña Petra y el Desierto del Wadi Rum 

Desayunamos y nos pusimos en marcha. Lo primero que visitamos fue la Pequeña Petra, que como su nombre indica es una Petra en tamaño mini, no por ello menos bonita, desde luego. Es más manejable y se tarda mucho menos tiempo en verlo. Se dice que Petra era donde vivían y enterraban los nabateos y la Pequeña Petra era digamos la zona comercial, donde paraban las caravanas que pasaban por allí para ir a Siria y a Egipto.

Lo más llamativo, sin duda, es el Templo a Dushara, el dios principal de los nabateos. Una de sus principales estancias es la Casa Pintada. Se abrió al público en el 2010 y en el techo tiene frescos que representan el vino y posiblemente la adoración a Dioniso, el Dios griego del vino. Se considera la única muestra de la pintura nabatea que ha sobrevivido. Se accede a las diferentes cuevas o estancias por escalones muy erosionados, ojo que resbalan mucho.

Finalizada la visita, continuamos hasta el desierto del Wadi Rum. Tardamos en llegar 2 horas aproximadamente. Al llegar Mohamed nos deja en el centro de visitantes, donde contratamos un todo terreno y guía para hacer el recorrido por el desierto.

El desierto está habitado por tribus beduinas que se encargan de organizar los tours para los visitantes. Lo que más nos llamó la atención fue:

  • Petroglifos, en el Khazali Canyon, con pinturas nabateas e islámicas de hace miles de años
  • La Duna de arena rosa, impresionante, nos descalzamos y subimos por ella disfrutando como niños
  • Um Frouth Rock Bridge, puente de piedra de 15m de altura al que difícilmente podrás resistirte a subir, no es muy difícil, a menos que tengas vértigo y las vistas desde arriba de las montañas amarillas de Um Fruth son impresionantes.
  • Little Bridge, otro puente de piedra más pequeño. Llegar a la cima es fácil y se tienen unas vistas preciosas del valle de arena roja y las montañas Jabal Rum, Jabal Um Ishrin, y Jabal Khazali.
  • Precioso atardecer en el desierto

Finalizada la visita, Mohamed nos llevó a nuestro alojamiento de esa noche, nada más y nada menos, que un campamento en pleno desierto.

Nos hacía muchísima ilusión, pero pronto se convirtió en decepción. Estaba montado como un típico campamento beduino, pero las tiendas por dentro no valían nada, incluso nos dio un poco de asco y dormimos vestidos. A pesar de que en la descripción, cuando lo reservamos por Booking, ponía que tenía baño privado, no lo tenía, eran baños comunes como los de un camping. La cena fue mala y no hubo la prometida velada alrededor del fuego. Habíamos leído sobre la experiencia de dormir en pleno desierto, las estrellas, el silencio, etc, pero por lo menos en nuestro campamento, nada de eso, porque se oían los coches y camiones que pasaban por una carretera cercana, por no hablar de los ronquidos de los de las tiendas de alrededor.

La Pequeña Petra y la excursión por el Wadi Rum merece la pena pero la experiencia de dormir en el desierto no nos gustó demasiado y ya sabiéndolo, habríamos hecho noche mejor en Aqaba (Mar Rojo)

Día 4 – Mar Muerto 

Nada más desayunar la exquisitez que nos dieron en el campamento, salimos hacia el Mar Muerto por interminables carreteras desérticas.

De vez en cuando se veían pueblecitos cuyas casas me recordaban mucho a las casitas de un Nacimiento.

Antes de llegar, Mohamed nos mostró una estatua de piedra y nos explicó que en aquella zona había transcurrido los pasajes bíblico de Sodoma y Gomorra donde la mujer de Lot se convirtió en estatua de sal por desobedecer a Dios y que aquella estatua lo representaba.

Los paisajes al acercarnos al Mar muerto, eran ya increíbles. Está a 400 metros bajo el nivel del mar y es el punto más bajo de la tierra.

Tras 4 horas de viaje, llegamos al Holiday Inn Resort Dead Sea, que recomiendo totalmente. El hotel tiene unas instalaciones formidables, está justo en la orilla y tras instalarnos en la habitación, dar una vuelta por el hotel y un bañito en la piscina, pudimos contemplar una preciosa puesta de sol.

Cenamos en el hotel y después disfrutamos de un cóctel al aire libre, hacía una noche magnífica. Nos fuimos a dormir deseando que llegase el día siguiente para experimentar lo que era bañarse en el mar Muerto.

Día 5 – Mar Muerto 

Hoy lo dedicamos por entero a descansar y disfrutar del Mar Muerto y de las instalaciones del hotel. Nos levantamos, desayunamos y nos fuimos directos a la playa. Como ya sabréis, el Mar Muerto no es un mar sino un lago salado con costas a Israel y Jordania. La salinidad del agua es 9 veces mayor a la del mar y esa densidad hace que no puedas nadar y te haga flotar. El agua es rica en minerales, por lo que son famosos sus barros por los beneficios para la piel, así que nos embadurnamos bien con barro, que el hotel deja en unos cubos grandes y tras secarse nos metimos en el agua. La experiencia es, sin duda, muy divertida porque por más que lo intentes no puedes sumergirte.

FLOTANDO EN EL MAR MUERTO

Esta riqueza de las aguas, hace que se haya desarrollado una importante industria cosmética alrededor de ella. Podréis comprar productos muy buenos, mascarillas, cremas, exfoliantes … De allí nos fuimos a la piscina del hotel.

Pasamos un magnífico día disfrutando del sol y el agua, que después de la maratón de Petra y el desierto, ya nos iba haciendo falta un poco de relax. Al atardecer volvimos a las aguas del Mar Muerto para contemplar desde dentro otra maravillosa puesta de sol. La sensación que me produjo el Mar Muerto, además de la experiencia de flotar, era de paz, una paz total y absoluta.

Aquí sí que te recomiendo muchísimo que hagáis al menos una noche o mejor dos, es una experiencia única y muy relajante.

Nos arreglamos para cenar y acabamos la jornada con otro delicioso cóctel, porque a pesar de que en Jordania, como es musulmán, el alcohol no está muy bien visto, en los hoteles si está permitido. Nos vamos ya dormir que mañana tenemos un día completito, río Jordán, Monte Nebo y Amman

Día 6 – Río Jordán, Monte Nebo y Amman

Después de desayunar, Mohamed nos esperaba en la recepción para emprender el viaje hacia el rio Jordán, Betania, otra de las partes del viaje que nos hacía mucha ilusión conocer.

Río JordánLugar del Bautismo de Jesucristo

Lo primero que visitamos fue la Iglesia ortodoxa de San Juan Bautista. Después visitamos el lugar donde Jesús fue bautizado por el santo en el río Jordán. Actualmente hay un entarimado desde el que se accede al rio para la ceremonia de los bautismos y pudimos presenciarlos en directo. El río Jordán es frontera natural con Israel y del otro lado también se ven instalaciones para bautismos, mejor preparadas que las jordanas.

El río Jordán actualmente no es tan caudaloso como lo era en los templos de Jesucristo, debido sobre todo, a la presa que construyeron los israelitas. Es bonito imaginarse cómo debió de ser en aquella época. El lugar ha sido visitado por los tres últimos papas, Juan Pablo II, Benedicto XVI y Francisco I.

Finalizada la visita, continuamos hacia el Monte Nebo (a 40 minutos)

Monte Nebo

Es el lugar desde donde Dios le mostró a Moisés la Tierra Prometida, a la que dirigió a los israelitas aunque se dice que él nunca llegó a entrar en ella y que está enterrado en este monte.

MONUMENTO EN MEMORIA DE MOISÉS EN EL MOUNT NEBO

Desde aquí se divisa el río Jordán, el mar muerto, Jerusalén, Belén, Jericó.

Algo muy característico del Monte Nebo es la Cruz Serpentina, que representa una serpiente enroscada a una cruz simbolizando la serpiente de bronce creada por Moisés en el desierto y la cruz donde Jesucristo fue crucificado.

CRUZ SERPENTINA

La Iglesia Memorial de Moisés fue construida originalmente en el siglo IV, ampliada en los siglos VI y VII durante la época bizantina y reedificada por los franciscanos en el siglo XX. En su interior aún se conservan mosaicos bizantinos del siglo VI. La iglesia estuvo cerrada por obras de restauración y se inauguró en 2016, ampliada, modernizada, pero manteniendo al antiguo monasterio, la basílica y los maravillosos mosaicos.

Tras la visita pusimos rumbo a Madaba (a 15 minutos).

MADABA

Fue la capital del Reino de Moab. Hoy en día es parada obligatoria para poder contemplar algunos de los mejores mosaicos bizantinos de Oriente Medio que se encuentran en su Parque Arqueológico, pero el más importante se ubica en el suelo de la iglesia de San Jorge, se trata de un mosaico que representa el mapa de cómo era Tierra Santa en el siglo VI d.C. Solo ha sobrevivido parte de él, pero les ha dado información a los arqueólogos para localizar escenarios bíblicos y ciudades perdidas.

Continuamos 40 minutos más hasta Amán.

AMÁN

Visitamos lo principal de la ciudad:

♦ MEZQUITA ABU DARWISH

Está situada en una de las 7 colinas de Amman. Fue construida en 1961 con piedra blanca y negra traída de Siria. Resulta de lo más bonita y original. No pudimos visitarla por dentro porque estaba cerrada, pero verla por fuera ya mereció la pena.

MEZQUITA ABU DARWISH

Después nos dirigimos a la Ciudadela de Amman.

Ciudadela

Está en la colina más alta y es un recinto espectacular. Lo más importante y que no te puedes perder es:

Palacio Ummayad o Palacio Omeya

Su nombre en árabe es Jabal al-Qal’a. Se trata de un gran complejo palaciego del período omeya, ubicado en la colina de la Ciudadela  de Amán. Fue construido durante la primera mitad del siglo VIII y actualmente gran parte de él está en ruinas. Tiene una cámara de entrada abovedada restaurada, conocida como el «quiosco» o «puerta monumental». Se puede visitar el interior.

PALACIO OMEYA UMMAYAD
Templo de Hércules

Se conoce también como Gran Templo de Amán. Se sitúa en el centro de la Ciudadela, frente al Muse Arqueológico. Es de origen romano y no está demostrado que allí se rindiera culto a Hércules, aunque las monedas halladas allí hacen pensar que así fue. En 1961 se descubrió en el interior del templo una roca con una inscripción datada entre los siglos VIII y IX a. C. En la sala principal del templo se encontraba una estatua gigante en mármol del dios, de unos 9 metros de altura, de la que se conserva un codo, un pie y restos de una mano. Las columnas y el techo del templo colapsaron durante el terremoto del año 749 y sus bloques de piedra fueron reutilizados como materiales de construcción. Entre 1989 y 1997 el pórtico, el sector noroeste del podio y tres de sus columnas fueron restaurados por arquitectos y arqueólogos de la Universidad de Jordania.

TEMPLO DE HÉRCULES

Un estudio exhaustivo ha permitido hacer un modelo a escala del complejo del templo y por ello se está estudiando la restauración completa.

Museo Arqueológico de Jordania

Está ubicado en la cima de la Ciudadela. Se construyó en 1951 y en él se exponen objetos de los sitios arqueológicos de Jordania, desde la prehistoria hasta el siglo XV. Están por orden cronológico e incluyen elementos de la vida cotidiana, como pedernal, vidrio, metal y objetos de cerámica y también joyas y estatuas y una colección de monedas.

Anteriormente, el museo albergaba algunos de los Manuscritos del Mar Muerto, incluido el único Rollo de Cobre, que ahora se exhiben en el Museo de Jordania

Desde la Ciudadela se divisa el anfiteatro romano, construido en el siglo II y tiene una capacidad para 6000 personas.

La Ciudadela vale la pena totalmente y mucho más al atardecer porque disfrutarás de una puesta de sol preciosa.

TEMPLO DE HÉRCULES

Después Mohamed nos llevó a nuestro hotel en Amman, Le Meridiem Amman, es fantástico y totalmente recomendable. Esa noche cenamos en uno de los restaurantes del hotel, más bien caro pero muy bien la cena y tras nuestro cóctel habitual en su formidable hall, nos fuimos a descansar. Mañana tenemos una excursión de día completo por los Castillos del Desierto.

Un día muy bien aprovechado y no quitaría nada de lo que vimos.

Día 7 – Recorrido por los Castillos del Desierto

Desayunamos en el hotel y salimos con Mohamed para hacer la ruta de los castillos del desierto. Se visitan 7 castillos, os hablo de los tres que más me gustaron:

Qasr Al Kharana, es el primero que encontramos yendo desde Amman, a unos 60 kms al sur. Fue construido por los omeyas en el siglo VII y tiene forma de cubo. A pesar de denominarse castillo, sus funciones no están claras, ya que no parece haber tenido uso militar y las rendijas que existen en las paredes de muchas habitaciones no son saeteras sino que sirven para ventilación. Parece más bien un palacete y podría haberse usado como caravasar u hospedaje para descanso de los viajeros, comerciantes, militares o peregrinos. El castillo fue dañado por varios terremotos y fue abandonado, siendo redescubierto en 1901 y reconstruido en los años 70 del siglo XX. Puede visitarse el interior.

Qusayr Amra, este fue el que más me gustó y también es el más popular. Fue construido en el siglo VIII por el califa omeya Walid I y se utilizó como residencia de los califas omeyas. Es Patrimonio de la Humanidad por la Unesco por los frescos que se conservan en su interior.

QASR AMRA

Qasr Al Azraq, es el único que tiene forma de fortaleza, es el más famoso por ser el castillo de Lawrence de Arabia. Es de basalto, fue construido por los romanos, reconstruido por los musulmanes, más tarde por los otomanos y posteriormente utilizado por Lawrence de Arabia entre 1917 y 1918 durante la Rebelión Árabe contra la ocupación otomana de la zona. Fue parcialmente destruido por un terremoto en 1927.

QASR AZRAK

Tras la excursión, regresamos a Amman y esa noche fuimos a cenar al restaurante Bonita Inn (3rd Circle, Ammán) Nos gustó mucho, está en un chalecito y puedes cenar dentro o al aire libre. Comida rica y bien de precio. Después nos fuimos a dormir. Mañana nos espera la última parte del viaje

Bajo mi punto de vista, la visita a los castillos merece la pena solamente si tienes días de sobra, sino yo prescindiría de ella porque hay que hacer muchos kilómetros para lo que se ve, es mi opinión personal.

Al regreso a Ammán, fuimos a visitar el Museo de Jordania que nos había quedado pendiente el día anterior.

Museo de Jordania

No hay que confundir este museo con el Museo Arqueológico que está en la Ciudadela. Este nuevo museo, mucho más grande, de hecho es el mayor de los museos de Jordania, se inauguró en 2014 y alberga los hallazgos arqueológicos más importantes del país. Está ubicado en Ras Al-Ain, junto al municipio de Greater Amman – Calle Ali Bin Abi Talib. La idea de construir un museo mayor y más moderno, según los estándares internacionales fue encabezado primero por el rey y después por la reina Rania, quien colocó la primera piedra. Cuentan con salas de conferencias, exposiciones al aire libre, exposiciones temporales, biblioteca, un centro de conservación y restauración, un área para actividades creativas infantiles, tienda y cafetería.

Los principales objetos que en él se exponen son: huesos de animales de hace 1,5 millones de años, una copia de la Estela de Mesa (la original está en el Museo del Louvre, en París y está siendo reclamada por el gobierno jordano), esta estela, una gran piedra de basalto negro, tiene inscripciones que son uno de los relatos directos más importantes de la historia bíblica. También se encuentran en este museo la estela de Balu’a, una cabeza de mármol de Tique, diosa griega de la fortuna y los rollos de los Manuscritos del Mar Muerto, especial importancia tiene el Rollo de Cobre, del siglo I d.C. porque el resto de los manuscritos encontrados estaban en rollos de cuero o papiro y este es el único en metal. Se exhibe en una cámara climatizada especial del museo. También se ubican en el museo las estatuas de ‘Ain Ghazal (un importante yacimiento arqueológico del Neolítico situado en la periferia de la ciudad de Amán), que son de las más antiguas hechas por la civilización.

HORARIOPRECIO
Diario: de 09:00 a 17:00h
Viernes: de 15:00 – 18:00h
Martes: cerrado

Residentes jordanos y árabes: 1 JD
Extranjeros no residentes: 5 JD

No está incluido en la Jordan Pass

HORARIOS Y PRECIOS MUSEO DE JORDANIA

Día 8 – Jerash y regreso a España

Hoy teníamos que madrugar para que nos diera tiempo de ver Jerash antes de tener que ir al aeropuerto para volver a España. Desayunamos en el hotel y nos pusimos en marcha. Jerash está aproximadamente a 1h de Amman. El paisaje que veíamos en el camino ya no era de desierto sino de pequeñas montañas y campos repletos de olivos, de hecho Jordania es un gran productor de aceite de oliva virgen extra de gran calidad. Llegamos a Jerash o Gerasa como se la conocía en la antigüedad, sobre las 09:30.

Jerash fue una de las ciudades más importantes del Imperio Romano y afortunadamente ha llegado hasta nuestros días en muy buen estado de conservación. Consta de dos teatros romanos, un hipódromo, imponentes templos, iglesias, plazas y otros edificios públicos.

Lo primero que vimos fue el Arco de Adriano, construido en el siglo II d.C para conmemorar la visita del emperador a la ciudad. Conserva tres arcos, el mayor de ellos de trece metros de altura, y cuatro columnas en las que destaca la decoración de la base.

ARCO DE ADRIANO

Nada más atravesarlo nos encontramos con el hipódromo, allí se realizaban las carreras de cuadrigas y nos imaginamos cómo tenían que ser. Hacen representaciones pero no coincidía con la hora. Fue construido en el siglo III a.C. y es el hipódromo mejor conservado del Imperio Romano.

HIPÓDROMO

Después nos encontramos con la Puerta Sur, una de las entradas de la muralla, que da paso a la parte principal de la ciudad, el foro y la impresionante columnata. Es muy similar al arco de Adriano, también cuenta con tres arcos, el central más alto y cuatro columnas.

PUERTA SUR

Nada más pasar la puerta, a la izquierda, está el Templo de Zeus, construido en el año 162 d.C. Una maqueta nos permitió hacernos una idea de lo majestuoso que era, con razón estaba considerado como el principal monumento de la ciudad. Hoy en día solo se conserva la escalinata de entrada, una serie de columnas corintias de 15 metros de altura y parte de los muros.

Desde aquí subimos al Teatro Sur, el más grande de Jerash. Su construcción terminó en el siglo I d.C, tenía una capacidad de 3500 espectadores y una acústica extraordinaria. Nos pareció realmente impresionante.

De allí salimos a la Plaza Oval, del siglo I d.C. Está totalmente rodeada de columnas jónicas en bastante buen estado y que nos recordó mucho a la Plaza del San Pedro del Vaticano. No se sabe con seguridad su función, pero se cree que pudo albergar un gran mercado.

PLAZA OVAL

De la plaza sale el Cardo Maximus, o Avenida de las Columnas, que es la calle principal de Jerash, tiene unos 800 metros de largo e impresionantes columnas a los dos lados. Fue construida en el siglo I d.C. Desde todas las puertas de la muralla se tenía acceso a esta avenida. Aún se pueden ver huellas de los carros en las piedras y canalizaciones para desaguar el agua de la lluvia.

CARDO MÁXIMO

En los laterales del Cardo Máximo se pueden ver monumentos como:

Macellum, se cree que fue una pequeña plaza o ágora con una fuente en el centro alrededor de la cual se disponían los puestos o tiendas.

MACELLUM

Templo de Dionisio, también llamado La Catedral, de la que apenas queda el pórtico y varias columnas, pero que según nos explicaron, en su día era una basílica enorme cubierta de mármol y antes fue un templo dedicado al dios del vino, Dionisio. El edificio original es del siglo II d.C. y fue reconvertido a iglesia en el siglo IV d.C.

TEMPLO DE DIONISIO

Después vimos el Ninfeo, que era una preciosa fuente-santuario dedicado a las Ninfas. Está muy bien conservado. Se cree que los arcos estaban decorados con figuras de las que emanaba el agua, siete cabezas de león, de hecho, todavía se puede ver la apertura por la que salía el agua y partes del desagüe.

NINFEO

A continuación, el Templo de Artemisa, al que se accede a través del magnífico propileo o pórtico con una escalinata de 30 metros de ancho. Originalmente fue el templo más importante de la ciudad.  Se cree que fue erigido en la primera mitad del siglo I. Dada la devoción de los habitantes de Jerash hacia Artemisa, el templo estaba profusamente decorado y recubierto en su exterior con placas de mármol. En su interior se alojaba una enorme estatua de la diosa. Tras el edicto de Teodosio I el Grande que permitía la demolición de los edificios paganos, los materiales del templo de Artemisa se utilizaron para construir iglesias. Después, en el siglo XII fue asolado por las guerras de los cruzados, pero tras la restauración, se pueden admirar actualmente once de las doce columnas originales del templo. Desde él se tiene unas buenas vistas de la ciudad al estar más elevado que el resto.

Después llegamos al Teatro Norte, se construyó en el siglo II y fue reducido a escombros tras un terremoto en el año 749. Es mucho más pequeño que el teatro sur, en este solo caben 1600 espectadores. En él no solo se representaban espectáculos, como obras teatrales, sino que también era el lugar donde se reunían los gobernantes de la ciudad. Destacan los colores de su orquesta.

TEATRO NORTE JERASH

Y llegamos hasta la Puerta Norte que sería el final de la ciudad, dimos la vuelta y volvimos a pararnos ante los monumentos que más nos habían impactado.

PUERTA NORTE

A mediodía salimos de Jerash con sabor agridulce, nos había encantado la visita pero teníamos que irnos al aeropuerto porque el viaje terminaba. Comimos algo a la salida en unos puestos que había y salimos hacia el aeropuerto. Nos despedimos de Mohamed e iniciamos los trámites aeroportuarios para volver a casa.

La visita de Jerash merece mucho la pena y no debería de faltar en ningún viaje a Jordania. Es la ciudad romana más importante de oriente y se la conoce también como la Pompeya de Asia.

MESESHORARIOSPRECIO
Noviembre a marzo:  
Abril y mayo:
Junio a octubre:
Mes del Ramadán:
de 08 a 16 h.
de 08 a 17,30 h.
de 08 a 19 h.
de 08 a 15,30 h.
12 JD, pero como está incluido en la Jordan Pass, si la tienes no pagas nada.
Los horarios de visita de Jerash varían en función de la época del año:

Nuestro conductor, Mohamed, fue muy majo, honrado y profesional. Si te interesa puedo facilitarte su contacto por email, losviajesdegema@gmail.com

Espero haberte ayudado a preparar tu viaje a Jordania, si es así o tienes alguna consulta, déjame tu comentario o contáctame vía email. Hasta la próxima escapadita!

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